No son horas extras que aparecen en la nómina. Tal vez porque son improductivas o porque invitan al absentismo. Quizás porque consumen el optimismo de manera paralizante, y de puntillas desvelan resentimientos.
Regalé las sonrisas iluminadoras. Tendré que salir de compras, necesito llenar la despensa de sonrisas que brillen e iluminen las horas negras.
10 comentarios:
:))))))
¿Te sirve ésta?
Qué bonito... Un besazo!!
Joder, lo he leído en voz alta y aún me gusta más. Es precioso.
Pues ya que vas, tráeme algo.
un besico guapa.
Nuna: ¡Jo! Ya me has puesto “colorá”! ya quisiera yo …
Charlie: Sí, cielo. ¿”Un sí señor y un mande usted” te vale? ;)
Otro besico para ti, guapísimo.
¿Salir de compras? un buen modo de olvidar malos rollos.
Besos
Anónimo: Si, pero a la cartera no le va muy bien.
Besos.
No le vá muy bien? mira el otro día tenía 47 e., en la cartera se los ofrecía a una chica y casi me manda a freir espárragos, jeje, es que no hay Dios que lo entienda y a tí aunque quisiera pues ná, porque ya no tengo ni uno de los 47.
Besos, si ahorro algo me pondré en contacto contigo ¿vale? jajaja
Te llamaré la próxima vez que salga de compras ¿vale? ves ahorrando...
Más o menos, el día que tu escribiste este blog me consumía la tristeza, aún hoy me supera a veces, pero la vida continúa y hay que coger el toro por los cuernos, jejeje.
Besos y de paso te dejo lo que escribí ese mismo día.
Hoy no tengo sueños
no me quedan ni recuerdos
sólo una tristeza infinita
un dolor punzante.
Hoy ya no sueño
sólo lágrimas de sangre
surcan mis mejillas
ojos sin vida
Hoy murió una parte de mí
hoy no siento nada
hoy no hay color en el cielo
hoy..quién soy?
Anónimo: Muy bien cogido el toro por los cuernos. Es precioso.
Besos.
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